¿¿Serás cabrón??

Lugar de los hechos: Campus de Espinardo, Aparcamiento de Químicas
Fecha: 2 de Junio de 2005
Hora: 16:40-19:50

¿Qué me he encontrado cuando he vuelto a por mi coche para volver a casa? Mi coche con la matrícula trasera doblada a posta. Si mi matrícula ha hecho el siguiente cambio...

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Es decir, un cabrón de mierda la ha doblado... pero ¿por qué?

Resulta que he llegado todo feliz sobre las 16:40 al campus, y viendo que en el parking de mi facultad no había sitio, pero que estaba la barrera de química subida, me he dispuesto a aparcar ahí. No he tardado mucho en encontrar un sitio libre, y como siempre, he aparcado de culo con otro coche (que también estaba aparcado así). Cuando he bajado, me he fijado que lo había pegado literalmente al otro coche; ¡ojo! nada de que lo he golpeado fuerte, ha tenido que ser justo, porque no he notado nada. De hecho, él invadía un poco lo que sería mi plaza.

El otro coche era un deportivo blanco, muy limpio. Me he parado 10 segundos a pensar si darle un poco para adelante por si le podía molestar o qué. Como llevaba prisa, pues no lo he hecho. Incluso he pensado en guardar su matrícula, pero mi intuición me ha fallado, diciéndome que no iba a pasar nada, que era un paranoico. Me voy a hacer prácticas de STA. Las prácticas siguen dando el porsaco, grrrrr...

Vuelvo con Carlos y vemos un coche con la matrícula rara... un Focus... ¡¡mi coche!! En cambio, el coche deportivo blanco ya no estaba. Pues bien, rebote del 15 que me he pillado, intentando poner bien la matrícula, que ha quedado doblada (ahora en mi casa la he puesto bien y apenas se nota).

Bueno, pues decirle al cabrón que no se preocupe, que no voy a buscar su coche y doblarle la matrícula, ni rayárselo, ni pincharle las ruedas, ni romperle un espejo, no hace falta. Seguro que conociendo tu forma de ser, ya que has sido capaz de doblar la matricula de mi coche por ¿nada?, este veranito, cuando vayas a la garru-disco de turno a 200Km/h te estrellarás, y saldrás disparado por la luna delantera de tu... de lo que quede de tu coche... y no, no morirás, desgraciadamente... Te tocará vivir el resto de tu vida en una cama, sin poder mover ni un solo músculo de tu cuerpo.

Jódete, cabrón!!